Dedicado al grandísimo Vilnius y demás becarios informáticos ICEX esparcidos por el mundo.
Esta mañana me hice un zumo de naranja. No suelo hacerlo, pero tenía las naranjas porque el otro día necesitaba cambio para el taxi y el puesto del frutero es lo más cercano a casa. Por supuesto, mientras lo hacía y me lo tomaba, sola y con la legaña todavía puesta, pensé en la metáfora de Borja y se me ocurrió escribir este post con mi propia versión, que lamentablemente es un poco triste.
Triste porque habría preferido que fuese más parecida a la de mi compañero, y hacer el zumo para Mohamed, hijo de Masata, padre desconocido por mí, pero es que hace como un mes o más que no lo veo. Un día, a la vuelta del trabajo, Jaqueline, mi bonne (viene siendo chacha, pero mola mucho más la palabra que usan aquí, bonne, que significa buena, buena en hacerlo todo), me preguntó si sabía algo de él, porque no le había visto en toda la mañana. Yo no sabía nada, le dije que a lo mejor le habían llevado al médico porque el día anterior estaba malo de la garganta y no le di más importancia. Pero tampoco le vi en toda la tarde, y a la mañana siguiente, de la que salía para ir a trabajar, se lo pregunté a Sonkor, el portero.
-Mohamed se ha ido a Marruecos con su madre.
Así, sin más. Masata no me había dicho nada de que se iban. Mohamed tampoco, supongo que él mismo no sabía. Según Sonkor el tampoco sabía nada. Me fui a la oficina flipando y a la vuelta encontré a la abuela de Mohamed y le pregunté. Me dijo que era verdad, pero tampoco me dio ninguna información más.
No he vuelto a saber nada. A la abuela la veo a veces y le pregunto, pero dice que no le han llamado. También veo a la tía a veces, y tampoco me dice nada. Nadie sabe, o nadie dice. Y yo no entiendo nada... o no quiero entender. El caso es que se echa de menos.
6 comentarios:
jooo pero qué dices? qué penita.. pusiste una foto una vez no? me da mucha pena.. pero en fin, te vas pronto, yo prefiero no despedirme... (y no pensar dónde estará ni qué hará :S)
Como lo lees, hija... y sí, había hablado de él, con foto, antes. Acabo de editar esta entrada poniendo un enlace e la anterior
Con el cariño que se ve que le tenias y de repente... pluff, se va y asi sin mas.
Igual como comenta tu amiga, la despedida habría sido más dura y en parte ha sido mejor así. Pero más que sea un adiós o hasta luego..
Ánimo ;)
Si piensas que no lo verás da mucha pena pero a veces las despedidas son infinitamente más trsites.
vaya, pues lo siento Pepa! sabia que le tenias mucho cariño. bueno, a saber la razón que ha llevado a la madre a hacer eso pero seguro que no ha sido tampoco un viaje de placer...
Vaya triste vacío el de Mohamed!!!
Me da bastante vértigo pensarlo... a ese enano se le cogía cariño con mucha facilidad, a pesar de su fijación por las armas, los cuchillos, las pistolas... y su obsesión con la muerte y las bestias.
Cuando vino Lino de visita a Dakar y se puso a fumar, Mohamed le repitió un par de veces con cara de rabia una frase rimada que no se nos ha olvidado a ninguno de los dos: "Ta tête va brûler comme un bout de papier". (tu cabeza va a arder como un trozo de papel)
Espero que sea donde sea donde se lo hayan llevado... todo le vaya bien a esa simiente de "psicopatilla"... tan linda... Sniff!!
Mil besos, Pepiña, y no sufras.
Por cierto: acabo de percatarme de que has puesto como foto de perfil la que te hice en el coche la noche en que nos quedamos tirados cerca de San Luis... ¿sabes? soy como una cría, bueno, ya me conoces, y me ha hecho MUUUUCHA ilusión.
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