Pues eso, que he llegado a lo que se puede llamar "punto de no retorno": ya está todo listo, no falta nada. Ya he terminado de ponerme las vacunas (me acabo de tomar la última, la segunda dosis de Dukoral -anticolérica), ya tengo fecha de vuelo (el día 4 de octubre a las 13:50 desde Coruña), ya tengo piso apalabrado en Dakar (por cierto, con mogollón de espacio para visitas, así que aplicaos, que como al final no venga nadie no os vuelvo a hablar), y ya han intentado pagarme. Digo intentado porque hoy he recibido un correo diciéndome que habían tenido un problema con el número de cuenta, pero bueno, que está al caer. También ya conozco a mis futuros compañeros becarios de la oficina, que son gente muy maja. Todo apunta a que este año va a ser genial.
Bueno, ahora voy a seguir con el curso, en breve más y mejor (o no).
De vuelta en Coruña tras mi experiencia en África
(Este blog apenas se actualiza ya; ahora estoy en "Otro Egoblog")
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martes, 25 de septiembre de 2007
sábado, 8 de septiembre de 2007
Toda la historia desde el principio
Hay una página en la que a veces escribo, en la que fui colgando mis impresiones sobre el proceso de selección para la beca desde el principio, aunque así directamente será difícil que lo encontréis. Hace tiempo que quería poner aquí todo lo que allí había escrito, para tenerlo todo junto y organizado, pero, como siempre, la vagancia. Bueno, hoy al fin lo hago, más vale tarde que nunca, ¿no?
NOTA: Copio y pego directamente de la página original.
I: Soy candidata [20 de Abril de 2007]
Hola, gente, hoy hago un paréntesis para contaros algo muy importante que me está pasando en estos momentos: soy candidata a una beca ICEX de Informática!! Estoy emocionadísima con el asunto, casi no pienso en nada más durante todo el día y tengo la imperiosa necesidad de publicarlo a los cuatro vientos, pero no puedo porque, al menos en el trabajo actual, lo mantengo medio en secreto. Pero os cuento ordenadamente:
El ICEX es el Instituto de Comercio Exterior de España, un organismo oficial cuyas funciones la verdad no tengo muy claras, pero me voy a tener que enterar a fondo, jeje. Lo que sí sé es que trabaja con las Oficinas Económicas de España en el Exterior, que dependen en las embajadas y se situan en los puntos del mundo en los que España tiene intereses comerciales. La beca a la que soy candidata es para desempeñar trabajos de administración de sistemas informáticos en estas oficinas. Te asignan un destino y allá te vas un año. Hay más oficinas, pero beca de informática la hay para 73(+1?) sitios. Lo de +1? lo pongo porque en realidad la convocatoria pone 74 contando Rio de Janeiro, pero por lo visto la oficina de allí va a cerrar, y no sé si quitan esa plaza, o la dan en otro destino, que también puede ser. En tal caso será un destino sorpresa.... mola!!
No recuerdo de memoria todos los destinos ofertados, pero os los copio desde la página:
ALMATY, ANKARA, ARGEL, ATENAS, BANGKOK, BELGRADO, BERLÍN, BERNA, BOGOTÁ, BRASILIA, BRUSELAS, BUCAREST, BUDAPEST, BUENOS AIRES, CARACAS, CASABLANCA, CHICAGO, COPENHAGUE, DAKAR, DAMASCO, DUBAI, DUBLÍN, DÜSSELDORF, EL CAIRO, ESTAMBUL, ESTOCOLMO, GUATEMALA, HELSINKI, HO CHI MINH, HONG KONG, JOHANNESBURGO, KIEV, KUALA LUMPUR, LA HAYA, LAGOS, LIMA, LISBOA, LONDRES, LUANDA, MANILA, MÉXICO, MIAMI, MILÁN, MOSCÚ, NUEVA DELHI, OTTAWA, PANAMÁ, PARÍS, PEKIN, PRAGA, RABAT, RIAD, RÍO DE JANEIRO, ROMA, SANTIAGO DE CHILE, SANTO DOMINGO, SAO PAULO, SEÚL, SHANGHAI, SIDNEY, SINGAPUR, SOFÍA, TAIPEI, TEHERÁN, TEL AVIV, TOKIO, TORONTO, TRÍPOLI, TÚNEZ, VARSOVIA, VIENA, VILNIUS, WASHINGTON, YAKARTA.
Por lo visto, aunque en la inscripción tienes que poner tus 5 ciudades preferidas para ir, te asignan según su criterio, así que es imposible saber a qué continente iré a parar, en caso de conseguirla.
Por cierto, en cuanto a la dotación económica está genial, dependiendo de la carestía de la vida en el destino, de 20.000 a 45.000€; y tengo entendido que en muchos de los destinos es media jornada, y en otros jornada intensiva. En resumen, que cobraría más o menos el doble que ahora trabajando menos horas, y con menos estrés. Más prometedor imposible, juas. Ah, y además, te pagan el desplazamiento al destino, que en el caso de Sydney, Shanghai, Tokio, y todo por ahí, pueden ser un par de miles también.
Pero claro, todavía soy solo candidata, tengo por delante un largo proceso de selección.
Lo primero, obviamente era cumplir los requisitos previos: tener una titulación universitaria, estar en el rango de edad, ser español(a) y no padecer ninguna enfermedad que te impida desempeñar el trabajo. Eso estaba ok, y me inscribí. La propia inscripción cuesta 20€, supongo que para disuadir a los que no lo tengan claro, y así simplificar la selección, habiendo menos. El otro día salió la lista de inscritos, somos 239 para 73 plazas, lo cual está muy bien: salimos a 3 aspirantes por destino. Considerando que alguna gente rechaza los destinos si no le dan uno de los que quería, yo creo que la cosa está relativamente fácil, pero intento, con éxito dudoso, no hacerme demasiadas ilusiones.
El proceso de selección tiene la ventaja de que no tiene en cuenta el expediente académico, porque el mío es bastante malo. Además, me parece más justo así, porque el hecho de no sacar buenas notas puede haberse debido a mil motivos, y a lo mejor sí eres tan bueno como cualquier otro para lo que se pide. La selección se basa en exámenes, como para una oposición. Primero, a finales de abril haremos un examen de informática que cuenta el 45% de la nota final; después, a finales de mayo, un examen de inglés que cuenta el 30%, más, si quieres, uno o dos exámenes más de otros idiomas a elegir (yo haré el de portugués solamente), que cuentan 2.5% cada uno. Por último, a los 200 que mejor situados hayan quedado de esos examenes, les harán entrevistas personales, y la entrevista puntuará un 35% de la nota final. A los 73 que mejor nota tengan tras la entrevista les asignan los 73 destinos en función de la nota (porque hay oficinas mas complicadas que otras), el perfil que haya detectado el entrevistador, y las preferencias. De esos 73, como alguno de los destinos no es muy apetecible (como Teherán o Casablanca ahora mismo, por ejemplo), y como alguno está muy lejos y hay gente que prefiere quedarse por Europa, siempre hay alguien que rechaza, y en función de eso van repescando de la lista, por orden, primero al que estaba en el puesto 74, luego al 75, y así. Por lo visto, el año pasado eran 70 plazas y fueron repescando hasta más allá del 150; si por estadística es, cabría esperar que este año repescasen hasta el 160 por lo menos.
Tengo entendido que en todo momento, los destinos te los ofrecen como quien ofrece lentejas: si quieres lo tomas y si no... te quedas en tu casita. Así que es un sinvivir hasta que te lo dicen, porque no sabes si te quedas al lado de casa (Lisboa o París), si te vas a pasar frio (Estocolmo, Oslo, Helsinky, Ottawa, Moscú, Vilna...) o calor (Lagos, Singapur, Sao Paulo); qué idioma se hablará, etc. A mí cualquier destino me hace una ilusión tremenda; lo único que preferiría salir de Europa, y sobre todo no querría volver a Lisboa, porque gustar me gustó, pero quiero conocer algo nuevo. Pero en cualquier caso me iría, aunque fuese a Lisboa. En la solicitud puse estos destinos como mis favoritos:
- Sao Paulo
- Sydney
- Singapur
- Luanda
- Ottawa
Los motivos son "dispersos", jeje. Por ejemplo, de Sydney y Ottawa me llama que son ciudades muy cómodas, sin casi problemas sociales; de Luanda me atrae precisamente lo contrario, me gustaría dedicar las tardes a hacer alguna cosa con alguna ONG que haya (bueno, esto está muy en el aire, obviamente). Sao Paulo, porque conozco gente allí, y porque los brasileños y brasileñas siempre me han caido muy bien, y me gustan la samba, el fútbol y el Carnaval, jeje. Y Singapur es por la ubicación y condiciones geográficas, tiene que ser paradisíaco. En todos estos destinos también juega a favor que conozco los idiomas respectivos, lo que creo que puede facilitarme las cosas.
Pues así están las cosas!! Lo malo es que me tiene la mente absorbida, y no puedo concentrarme en nada...
II: Candidata... y con posibilidades [21 de Mayo de 2007]
El pasado día 28 de abril, empezó la "carrera", el primer examen, de conocimientos informáticos. Fue un examen feo, y no salí demasiado contenta... preguntas extrañas, cosas que me parecían poco importantes preguntadas a un nivel de detalle rayano en lo estúpido, a la vez que otras a mi juicio mucho más importantes preguntadas con mucha superficialidad (La pregunta "¿qué es Linux?", con una opción "un plugin de Windows", me llegó al alma, la verdad). Pero bueno, no lo tenía claro, en muchas había contestado sin saber si contestaba la correcta, pero sabiendo que mi respuesta tenía sentido, que algo es algo. Yo, que en la uni era famosa por poder afinal mis resultados de exámenes hasta la décima antes de que salieran las notas, en este caso estaba completamente desorientada. Y encima era muy importante, más que la nota en sí, la colocación en el ránking final, en funcion de las notas de los demás.
Pues bien, salían las notas el jueves pasado, 17 de mayo, día de las Letras Galegas. Qué emoción y qué nervios pasé, mare! A las 10 o algo así me desperté como un resorte, y me fui a ver en el ordenador si habían salido. Tardé un poquito en encontrar el enlace en la página del ICEX, pero en seguida di con él. Las notas estaban ordenadas alfabéticamente, en lugar de por resultado. Las primeras que vi fueron las de las 25 personas primeras por orden alfabético de apellidos, la mayoría entre el 50 y el 60 (porcentuales). Cambié al segmento en el que debería estar yo y me busqué... SUBIDÓN!!! Tenía un 64 y pico!! Casi no me lo creía, no había visto muchas notas por encima del 60 todavía! Seguro que era una buena posición. Me dispuse a prepararme un Excel para ordenarlas por puntuación y ver por dónde andaba. Tenía calculado que quedar del 100 p'arriba era muy pero que muy buena señal, basándome en los datos del año pasado. Un clic aquí, otro allá... listo! A ver... SUBIDÓN!!!! 27!!! Uaahh!! Me costó controlarme de hacer un escándalo!!! Uf!! Les envié mensajes a mil amigos: eso significaba que mucho lo tendré que cagar en lo que resta para no llegar a pillar nada.
El examen de informática cuenta un 45% del total (lo que significa que ya tengo 29 puntos porcentuales de la nota final asegurados) el de inglés el 20%, el de portugués (voluntario) 2,5% y la entrevista el 25%. Con hacer lo que me queda "pasable", llegaré a 50, y eso el año pasado era plaza prácticamente directa, sin depender de que nadie rechazase su destino ni nada...
Así que si antes estaba nerviosa y que no lograba pensar en nada más... imaginaos ahora, que lo veo prácticamente hecho (aunque mantengo ciertas reservas, porque el inglés no se me da especialmente bien, y temo llevarme un chascazo).
El próximo paso es inglés y portugués, el sábado que viene ya (el 26 de mayo) y las notas creo que salen el 8 o el 9 de junio, no recuerdo bien. Estoy que no quepo en mí... Al principio, cuando me apunté, y sobre todo cuando me di cuenta de que me coincidía con el viaje a Londres, pensaba que estaba la cosa casi imposible, que igual no merecía mucho la pena la matada de ir hasta Madrid a examinarse, si seguro que se presentaban cientos de tíos y tías más preparados que yo, etc, etc. Pero no quise pasar sin probar suerte, no quise tener que pensar en el "y si...", y allá me fui, con decisión, con la tranquilidad de pensar que si no sale, no pierdes nada realmente, la única forma en que seguro no la sacaba era no yendo. Y efectivamente aquí estoy, en el top 30, contra mis mejores pronósticos!
La moraleja de todo esto es que, cuando quieras algo, por difícil que lo veas, no debes dejar de intentarlo, nuncas se sabe, si no pruebas, de por sí es un fracaso, si pruebas, puedes lograrlo o no, pero por lo menos te das opciones. Este razonamiento parece una obviedad, pero os aseguro que me he encontrado muchísima gente que no parece compartirlo, gente que usa la expresión "no vale la pena" con una ligereza que yo no entiendo... Sí vale la pena. Siempre y cuando quieras. Por supuesto, yo respeto las decisiones de los demás, pero a menudo la verdad es que no las entiendo.
III: De bajón, pero aún con esperanzas [30 de Mayo de 2007]
Como prometí manteneros informados de mi andadura tras la beca ICEX de Informática, y este fin de semana hice los exámenes de idiomas, pues os cuento, que soy mujer de palabra, aunque la verdad es que no me apetece especialmente hablar de ello.
Para empezar desde el principio, me remontaré a cuando esaba todavía en Coruña, a toda la semana pasada. Toda la semana he estado bastante nerviosa por los exámenes, no por miedo a que me salieran mal, sino por ansiedad... no puedo con la espera de saber si lo consigo o no, o en tal caso a dónde me voy. Además, en el trabajo he tenido muchísimo lío, porque teníamos que presentar la documentación para pedir una subvención y nos faltaban mil cosas. Estuvimos toda la semana mano a mano el jefe, otro compañero y yo. La verdad es que no estuvo mal, a mí me gusta mi trabajo, y con ellos me llevo muy bien, me siento muy a gusto. Pero trabajamos muchísimo, parando solo para comer, juntos, de prisa y sin quitarnos aquello de la cabeza (eso sí, comida de p.m. a cuenta del jefe, jeje); y volviendo a casa bastante más tarde de lo normal, el último día, jueves, a la una de la mañana. Total, que eso no me habría importado de normal, pero es que no pude chapar nada de nada.
Por otra parte, durante esa semana, se la pasaron mis amigos intentando quedar conmigo, sin decirme para qué, engañándome con excusas, pero lo que querían era darme el regalo de cumpleaños, que había sido la semana anterior. Como me habían estado llamando los otros días, el viernes, aunque quería acostarme temprano porque tenía que coger el avión a las 6 de la mañana, quedé de pasarme un ratillo a las diez. Como esa tarde libraba, esperaba dormir la siesta, pero no pude, entre los nervios y que mis compañeros de piso decidieron que era un día estupendo para aprender a tocar y enseñar a tocar la guitarra. Por la noche acabé yendo a tomar una tapa y hasta casi la una otra vez. Me acosté echa polvo y preocupada por quedarme dormida, y por eso no descansé nada bien.
Me quedé dormida. De milagro no perdí el avión. Lo tenía a las 6:10, y me desperté a las 5:15 (el despertador lo había perdido entre las mantas, se ve que lo había cogido y apagado), menos mal que había hecho el check in online, y ya tenía tarjeta de embarque, porque si tengo que facturar no me da tiempo ni de coña. Ni me duché ni nada, ni siquiera había preparado el equipaje, que con las prisas se redujo a una muda limpia y una camiseta para dormir (me quedaría en Madrid hasta el domingo por la tarde). Tampoco desayuné. Salí de casa corriendo. No me acordaba donde tenía el coche, pero lo encontré, afortunadamente, bastante rápido. Conduje hasta el aeropuerto y lo dejé mal aparcado, justo en frente de una señal enorme de prohibición; decidí que prefería pagar la multa a perder el avión y mi oportunidad. Corriendo llegué a la puerta de embarque, para comprobar que el avión se retrasaba unos minutos. Me cabreé muchísimo, ¿cómo puede retrasarse, aunque sólo sea un minuto, la salida del primer avión de la mañana? Yo estaba preocupadísima, incluso sin retraso, llegaría a Madrid con el tiempo muy justo, y a la T4, que es peor.
Entre pitos y flautas, el avión aterrizó a las 8:05, 25 minutos de retraso. Y yo necesitaba estar en el sitio del examen a las 8:30. Corrí hasta la estación de metro de la T4, con la incertidumbre de que no sabía dónde estaba exactamente y tenía miedo de no encontrarla. Pero llegué en seguida, recuerdo haber mirado el reloj a las 8:11 justo cuando llegué. Según la página del metro de Madrid, allí y a aquella hora pasaba uno cada 3 minutos, así que no tendría por qué preocuparme, porque hasta mi salida, en Parque de las Naciones, sólo había tres paradas. Pero el metro tardó casi 10 minutos, casi me da un mal con los nervios.
Llegué a Parque de las naciones a las 8:27, pero desorientada. Sabía que se podía llegar al centro de los exámenes en un par de minutos caminando, pero no sabía hacia donde tirar; había creído que me acordaría por la otra vez que había estado, pero no. Así que empecé a preguntar desesperadamente. Pero a nadie parecía sonarle aquella calle ni el nombre del edificio. Le pregunté a varias personas, 7 u 8, y nada. Al final, me cogí un taxi en el Palacio de Congresos; la taxista tampoco sabía la dirección, menos mal que tenía GPS! Llegué a mi destino a las 8:38, pero a tiempo, la gente estaba entrando. Buf, ¡¡qué alivio!!
Soy consciente de que tenía unas pintas lamentables, con la primera ropa que había encontrado, despeinada, sudada, con ojeras... un cromo, vaya, pero estaba allí, estaba contenta.
Había quedado en un punto en concreto con gente de un foro de aspirantes y becarios de estas becas hacía un rato, pero como llegué tan tarde ya no esperaba verlos. Sin embargo, mientras me buscaba en las listas, alguno me reconoció y saludó. La verdad es que lo agradecí, pero entre que tomé nota de las aulas y horas de mis cuatro exámenes (inglés escrito a las 9:00; inglés oral a las 10:00; portugués escrito a las 12:30; y portugués oral a las 13:30) y busqué el aula del primero no tuve tiempo de hablar con nadie, en realidad.
El primer examen, inglés escrito. Por el tipo de examen que era, yo estaba confiada, ilusa de mí. Consistía en un único texto, de un folio de longitud, al que habían quitado 50 palabras que tú tenías que rellenar. Para cada hueco te daban 4 opciones, y una respuesta errónea restaba 0.33 puntos, de tal forma que, en término medio, estadísticamente, el que contestase a todas al azar, sacaría un 0. Las opciones eran chunguísimas, todo sinónimos, no quiero aburrir con esto, pero vamos, que yo creo que se lo ponen a un nativo y también duda. Es más, creo que se lo ponen al autor del texto original, y ya no vuelve a poner lo mismo en todas. Desde luego, no era nivel de 3º de EOI, como se suponía. Porque yo bilingüe no soy, ni mucho menos, pero leñe, en selectividad saqué un 9, y se supone que es ese nivel más o menos. Pues en este, me he encontrado con que no sabía fijo ninguna, así que lo de dejar solo en las que dudaba no me valía, decidí contestar a todo, que en cuestiones de azar cuanto mayor es el número de experimentos, más se acerca el resultado a la esperanza matemática (es decir, que dado que mi mejor espectativa era el 0, no tenía nada que perder y me tiré a la piscina). Salí del examen muy descontenta, no sólo por lo mal que me había salido, sino por lo traicionero que me pareció.
Pero no tuve tiempo de regodearme en mis penas, ya eran las 9:55 y tenía que presentarme en la sala del oral. Se suponía que era la tercera que tenía que entrar, pero cuando llegó la examinadora, era la única presente, y me mandó de primera. Que yo sepa, aún no se había examinado nadie, ni en esa aula, ni en ninguna otra. Entre el disgusto del escrito, el estrés que había pasado para llegar, la falta de sueño que arrastraba de toda la semana... tranquila no estaba, precisamente. Me senté delante de la profe y me temblaba todo. Me dio una hoja con un texto de unas 15 líneas y unas preguntas al pie, que me pidió que leyese en voz alta. Pedí permiso para leerlo para mí primero, y no me dejó. Así que empecé a leer, me trastabillé un poco y perdí el sentido de la primera frase, y se notaba que estaba diciendo las palabras inconexamente. Mal comienzo. Pero bueno, para el final del texto me había soltado un poco y las leí más o menos aceptablemente. Después, la examinadora me fue formulando una a una las preguntas que venían en la hoja, sobre mi opinión acerca del texto. Encima, el tema del texto no me molaba nada: oportunidades de trabajo para los jóvenes, que si en Irlanda se confia en ellos y en su capacidad, iniciativa, energía, etc; mientras que en Francia se teme mucho por su inexperiencia, y no se les dan buenas oportunidades. Preguntas: ¿Estas de acuerdo? ¿Cual crees que es la situación en España? ¿Por qué? Etc... Menos mal que la frase "no sé, nunca me había parado a pensar en ello y no tengo una idea formada" me la traía pensada de casa, porque creo que fue lo único que dije con sentido. Bueno, algo más sí, pero muy atropelladamente, muy insegura, muy mal...Es que no se me ocurría nada. Jo, a otra gente le preguntaron temas sobre los que sí tenía opinión... En fin, a lo mejor me habría cortado por igual con todos, no sé.
Lo bueno que tuvo entrar a inglés de primera, fue que quedé libre mucho rato, hasta portugués, y mientras tanto la otra gente esperaba a entrar a inglés. En este intervalo de tiempo fue cuando hice más vida social, que sinceramente fue lo mejor del dia. Me encantó conocer por fin a alguna gente del foro, todos me cayeron muy bien, así que espero que me dén la beca para hacer el curso con ellos, porque pinta que nos lo pasaremos muy bien.
Me despedí de mis nuevos amigos para ir al escrito de portugués, que de los del foro era la única que lo tenía. El tipo de examen era el mismo que el de inglés, pero menos p**o; en lugar de tanto sinónimo, que también los había, teníamos además formas verbales, ortografía, demostrativos... un poco más variado, en resumen. Acabé relativamente pronto y entregué. Al entregar, me informó la vigilanta de la sala que tenía mal marcado el idioma, que sólo había que marcar el portugués, para que la máquina de corregir discriminase los idiomas (es que era una hoja de respuestas de ésas para lector óptico); yo había pensado que era por temas estadísticos, o para a ver cuáles eran los idiomas en los que te manejabas, de cara al destino y había marcado "castellano, gallego, inglés y portugués", ahí es ná. No pasó nada, estaba a lápiz y lo corregí sin mayor incidencia... pero es que en el de inglés había hecho lo mismo!!! Se lo dije a ella y me dijo que no pasaba nada, pero no me quedé tranquila. De todas formas, no era el momento de rallarme con eso, que aún tenía el oral de portugués.
Me dirigí a la sala del oral de portugués, en la que estaba convocada a las 13:30. Llevaba, por cierto, sin comer, desde el día anterior a las 3 de la tarde, un bocadillo cutre. Imaginaos qué pájara. En este, era la sexta en entrar; a 10-15 minutos por persona, esperé más de una hora allí de pie; casi me da algo. Lo bueno, es que estuve hablando con la gente que estaba esperando, de portugués, alemán e italiano, y también me cayeron guay. Les hablé del foro, y al dia siguiente aparecieron en éste como 20 usuarios nuevos, jajajaja. Cuando por fin entré a portugués, estaba en las últimas, de cansancio, hambre y nervios. El sistema, como el de inglés; el tema, más de mi gusto (funcionarios); el idioma, mejor en general. La verdad es que este sí que me salió bastante bien, incluso me reí con la profesora, jeje. Y es que como mi mejor amigo se está preparando unas opos, sobre este tema sí tenía una opinión que dar, una opinión bien formada. Lo único que en un momento dado me puso una cara rara, porque dije algo de los funcionarios de la enseñanza... sin darme cuenta de que ella era uno!!! A ver si no es vengativa, jeje... Me cortó bastante pronto y me dijo que "lo que necesitaba ver ya lo había visto". Frase que en sí misma no tiene por qué ser buena, pero por su expresión me dio muy buen rollo. Así que, después de todo, salí de allí bastante contenta.
Y bueno, los exámenes acabaron ahí. Iba a ir a comer a casa de amigo, pero al final hablé con él y decidí ir con un par de compañeros de fatigas, ya que él ya había comido y no quería hacerle trabajar en vano. Además aquellos chicos me habían caído bien.
Hasta el lunes, ya poco más tengo que decir al respecto. Pasé el resto del sábado y el domingo entero en Madrid, aprovechando la coyuntura para estar con estos amigos a los que casi no veo. Lo pasé bien, pero eso ya sería, en todo caso, tema de otra opinión.
El lunes volví al trabajo, pero a decir verdad no me cundió mucho. Por una parte estaba demasiado cansada, y por la otra demasiado nerviosa. Hasta me salió un orzuelo, mal típico del estrés, que todavía me está dando la lata. Por la tarde, vi en el foro que alguien había encontrado el texto original del examen escrito de inglés y había publicado el enlace. Lo miré, craso error; me deprimí. No recordaba todas las preguntas y respuestas, pero de las que recordaba, tenía bien menos de la tercera parte, y el resto mal. Echando el cálculo, mi nota oscilará entre el 0 y el 1... y no exagero, lo pienso de verdad. Si resulta que haya acertado la mayoría de las que no recordaba, que puede ser que por eso no me hayan llamado tanto la atención, puede que llegue al 2, pero no más, eso seguro. Insistir en lo de que eran opciones muy raras. Cosas como (traduzco, pero mantengo el sentido):
Por sus _______ calles puedes encontrar ...
a) atestadas
b) ruidosas
c) tortuosas
d) empedradas
Que bueno, en el resto de la frase habla de mucha gente y puede que la que más sentido tenga sea atestadas, pero que eso no implica que cualquiera de las otras 3 puedan ser correctas... al menos yo, no sé si las calles de Bombay son empedradas o no, pero eso es porque no estuve allí, no porque no sepa inglés.
La parte menos mala es que fue lotería poderosa para todos... así que como lo que cuenta es el ránkin, si las listas no se mueven exageradamente, puedo mantenerme en un puesto aceptable (por andar alrededor del 100 firmaba ya mismo), que aunque no me dé plaza directa es más que probable que remonte en la entrevista o, en último caso, que pille cacho en las repescas (lo cual me viene estupendamente, porque la mayoría de la gente rechazaría destinos que se encuentran entre mis favoritos, como los de África Subsahariana, Sudamérica, o Europa del Este).
Además, aunque el portu puntúa poco, cuento con que un par de puestos me los puede dar. Del examen de portugués, por cierto, comentar que también he visto el texto original y, aunque no voy a reclamar, porque no puntua lo suficiente para que merezca la pena, estoy viendo que al menos dos me las van a dar por falladas erroneamente. Y explicaría el motivo, pero es que sería un rollo que no merece la pena. Lo que sí os digo es que yo estoy segura de que mis opciones son más correctas que como lo ponía el periodista que escribió el artículo. Sé que suena demasiado "sobrao", pero es cierto, absolutamente cierto. Y eso me cabrea.
Total, que a la espera de lo que suceda estoy hasta el próximo día 8... os mantendré informados.
IV: Sigo en la brecha [9 de Junio de 2007]
El viernes pasado salieron los resultados de estas pruebas de idiomas, y esta opinión es para contároslos. Eso, y más detalles. Lo malo es que no me siento inspirada, pero bueno.
La espera por las notas fue dura. Estando ansiosa, 8 horas en la ofi al día pueden ser una tortura. Menos mal que el jefe es comprensivo y además desde que le he dicho lo de la beca me hace la pelota cosa mala, jeje. En varias ocasiones me ha hecho ver que se daba cuenta de que no daba estaba cundiendo, pero de buen rollo, haciendo la broma de en qué parte del mundo tenía la cabeza, o algo así.
Total, que salieron el viernes. Inglés mal, un 34%, la nota 150 y pico de los 195 presentados... una pequeña vergüenza. Si llega a depender sólo de inglés habría bajado 39 puestos en la clasificación general, hasta el 66, que tampoco sería tan malo porque es dentro de los 74, pero bueno, mejor cuanto más arriba. Portugués, sin embargo, muy bien, creo que saqué la cuarta o quinta mejor nota de todos los exámenes de idiomas que no eran inglés, un 74%, y eso me salvó 19 plazas!! Así que en lugar de en el 66 quedo en el 47, dentro del top 50. Por mí genial. Prefiero estar así por el medio que entre los 10 primeros, porque a éstos lo normal es que los envíen a las oficinas más grandes, donde más se trabaja. Es cierto que también es donde más se aprende, pero mi motivo de pedir la beca pertenece más al plano personal que al profesional, y quiero tener tiempo libre no sólo para hacer turismo, sino para dedicarme a mi formación por libre, algo que echo mucho de menos desde que trabajo.
Así que sigo adelante con el proceso de selección. Próxima estación: entrevista personal, el 27 de junio. A ver lo que me espera. Después de eso, a mediados de julio, sí que ya te dicen si entras y, en tal caso, el destino. No os imagináis ninguno cuánto me tarda ya. Esta incertidumbre es horrible.
Por otra parte, otra cosa que quería comentar, es que a raíz de todo esto me ha estado mi jefe hablando de los proyectos de futuro de la empresa, y de lo que tenía pensado para mí y demás, para meterme ilusión e intentar que me quede, porque la verdad es que seguro que a nivel profesional me vendría mejor. En realidad me tienta, mi trabajo me gusta y me tratan bien, no tengo motivo para querer irme, pero el caso es que siento que estoy quemando los últimos cartuchos de mi juventud (suena mal, pero es cierto, seré joven todavía unos años, pero no tanto como para andar por el mundo haciendo el ganso y sin pensar más que en el yo y el ahora); tengo inquietudes de viajar y ver mundo, que nunca lo he podido hacer por falta de dinero, y seguramente si no lo hago ahora ya no llegue a hacerlo. Si me quedo ahora ya todo pinta que será para estabilizarme en este trabajo, que me encanta, es cierto, pero creo que es pronto. El contrapunto es el pensar en qué me esperará, si me voy, a la vuelta. Encontraré otro trabajo, eso seguro, y con toda probabilidad mejor pagado. Pero el factor humano, que yo valoro tanto como el sueldo, está más difícil, y en ese aspecto sí creo que lo puedo tener más difícil a la vuelta...
Así que ya véis que no lo tengo nada claro. De momento he decidido, y así se lo he dicho ya al jefe, que iré a la entrevista como tenía pensado y que decidiré si lo tomo o lo dejo en función del destino que me ofrezcan. Lo malo es que me ofrecerán un destino u otro, seguramente, en función de lo que diga en la entrevista, y ya no sé cómo orientarla. Estoy en un mar de dudas e incertidumbres. Voy a estar, Dios mediante, ante una de las decisiones más importantes, por no decir la más importante, que haya tenido en toda mi vida.
V: Desenlace de la beca ICEX: Me voy a Dakar!!!! [12 de Julio de 2007]
Bueno, bueno, bueno, Dakar, capital de Senegal, dos millones y medio de habitantes, situada en el Cabo Verde, punto más occidental de África, un calor que te torras todo el año, una situación socioeconómica razonable... un destino FETÉN, por lo menos para mi gusto, y eso que no lo había puesto entre las favoritas.
Pero bueno, estoy empezando por el final. Os contaré primero qué tal la entrevista. Fue el 27, jueves. Llegué a Madrid el día antes a las 8 de la tarde aprox, y me fui a dormir a casa de mi amiga Sandra en Torrelodones. Cené en su casa con ella y unos amigos suyos, una velada agradable, y tempranito para camita (amablemente me cedió la suya) que al día siguiente había que cundir. Al día siguiente, me tuve que levantar muy temprano, aunque la entrevista era las 10:30, es lo malo que tienen las afueras. Me vestí lo mejor que pude (la elegancia no es lo mío, la verdad), con un pantalón cremita y una camisa de rayas, y me fui a coger el autobús. En realidad llegué al sitio de la entrevista casi una hora temprano, pero mejor, no quería nervios. Me fui a desayunar a un Rodilla cercano y, como me agobia estar sola en un establecimiento me salí enseguida. Los zapatos (unos "24 horas" que me costaron una pasta) me estaban haciendo un daño terrible, bueno, en realidad eran los calcetines, que eran nuevos y eran como ásperos (los tiré esa misma tarde a la basura), y busqué una farmacia para comprar apósitos Compeed. De camino me encontré a otro de los aspirantes que tenían la entrevista, uno muy majo que ya había conocido el día de los idiomas, que por cierto estaba de numero 2 del ránking, le dije que iba ahora y segui hacia la farmacia. Compré los apósitos, me puse uno en cada pie sentada en un banco de la calle y volví al sitio de la entrevista.
Cuando entré me encontré con que ya estaban allí tres chicos conocidos, de los habituales del foro y a los que ya había conocido también el dia de los examenes de idiomas. Gente supermaja. Tuve que esperar un ratillo, los otros conocidos fueron pasando antes y según iban saliendo me iban contando sus impresiones. La verdad es que todos salían contentos, la entrevista parecía ser muy distendida.
Por fin me tocó a mí el turno. He de decir que esa mañana me había levantado con el cable cruzado y tenía medio decidido que me quedaría en mi empresa actual, donde me habían ofrecido una mejora de condiciones bastante apetecible, donde estoy muy contenta del trato y del trabajo, y donde se me estaban abriendo caminos de mejora profesional apetitosos. Así que yo iba en plan "sobrao", ya que no tenía nada que perder, porque no me preocupaba si no les gustaba y no me daban nada. Hice la entrevista más informal de todos los tiempos (solo tengo pena de no haberme presentado en camiseta y vaqueros), sin preocuparme en lo más mínimo de aparentar nada, simplemente les iba a comentar mi situación y "a ver". Paradójicamente, esa actitud estoy segura de que me valió un montón para hacer la entrevista que hice, de la cual sali bailando de satisfacción.
Tuve la sensación de llevar yo las riendas en todo momento, y eso cuando te están entrevistando 3 personas para un señor organismo como es el Instituto Español de Comercio Exterior es un puntazo. En el momento ni me daba cuenta, pero lo pienso ahora y pienso "tía, no es normal ir de tan sobrada, deberías haberte cortao un poco", y a continuación "qué va!! La sensación esa es subidón subidón!!", me da la risa, me crezco... jajaja. Me preguntaron un par de cosas en las que metí la pata, y yo más ancha que larga en plan "ah, no, pues no sabía", jeje. Relax Total.
Y el cúlmen fue ya cuando hablamos de los destinos. Después de haber comentado en el devenir de la entrevista la mejora que me hacían en la empresa, y que la verdad ya no estaba tan convencida de irme como en el momento de echar la solicitud (sinceridad before all), les noté muy interesados en ofrecerme un destino que "realmente" no fuera a rechazar. Yo sabía que a la mayoría de los demás les preguntaban por un par de destinos, conmigo se recorrieron el mapamundi enterito, para asegurarse, y eso que tenían la lista de mis 5 favoritos. Después de mucho preguntar, llegué a decir algo así como "hombre, al que me iria fijísimo es a São Paulo". Era mi predilecto, siempre he querido conocer Brasil, y en São Paulo tengo familia, y bueno, no sé el motivo, pero me llamaba mogollón. Pero los motivos a ellos no se los expliqué mucho, no me dieron mucha opción. El caso es que me preguntaron como para asegurarse de que me habían oído bien, y le vi al que aparentemente mandaba más como apuntaba São Paulo y lo rodeaba con un círculo. Razón por la que salí pensando que a São Paulo me iba casi fijo. Pero debió de ser una bromita del tipo, porque ya veis que no, jajaja.
La clave de la entrevista, creo yo visto ahora que ya pasó estuvo en el momento en el que dije algo así como "por cierto, sobre mis 5 destinos predilectos de la solicitud, quería decir que he cambiado de opinión sobre Luanda, y que no me iría allí". A lo cual noté que los 3 pares de ojos que a mi frente estaban se clavaban en mí a la espera de explicación, como diciendo en silencio "Comoooorrrr, pero si a Luanda era a donde te ibamos a mandar sin lugar a dudas???". Uno de ellos exclamó "pero si en Angola se habla portugués", y yo "ya, ya lo sé , pero es que me he estado informando y me ha entrado un poco de miedo, creo que lo pasaría mal, y para eso, considerando lo bien que me lo ponen en el trabajo actual, pues no me arriesgaría". Y él "pues es una oportunidad inmejorable de conocer África". Y yo "sí, si por eso estaba entre mis 5, que conocer África me gustaría un montón, pero...". Total, que se dieron por vencidos respecto a Luanda, y atacaron por el flanco: "Y entonces, a Lagos??", a lo cual yo ya no sabía ni dónde meterme. Sabía que el becario de Lagos estaba contento, pero la situación social y política de Nigeria me parece que es muy del estilo de la de Angola, y me daba miedo también. Así se lo dije, aunque no tan tajante como con respecto a Luanda. Y después añadí: "mira, de África solamente me iría a Dakar o a Johannesburgo". Y el tipo, "Y a Argel?" Respuesta: "No, no me iría a un país islámico". Anotar aquí que, aunque en la entrevista no lo dije y lo sabía, Senegal es un país islámico, pero lo veo de otra forma, creo que no es tan integrista como los del Magreb. El motivo no es más que el hecho de que soy mujer, y como no sé las costumbres, lo que se llevarían a mal y lo que no (como irme a bañar a la playa en bañador, por ejemplo), pues mejor curarse en salud, y directamente no ir. Una cosa es ir para unos días de turismo, y otra muy diferente para vivir un año entero.
Total, que después de la entrevista fui a comer con los compañeros, y ahí estuvimos intercambiando impresiones hasta las 6 o algo así, que ya nos separamos porque se iba cada mochuelo a su olivo, cada uno a su ciudad de procedencia. Yo en cambio, me quedaría hasta el domingo, aprovechando que era la semana del EuroPride en Madrid, había una fiesta tremenda, e incluso iban unas amigas mías que me traerían en coche de vuelta. Todo a pedir de boca. Y por cierto me lo pasé muy pero que muy bien. Pero ese fue el motivo principal de que ya no escribiese sobre la entrevista. Llegué el domingo tarde y el lunes me pilló una vorágine de trabajo tremenda. Entre eso y que dedicaba cada minuto libre a ver si había alguna noticia de lo de la beca, figuraos, jeje.
Y por fin, hoy, han salido las listas definitivas. Y me han dado Dakar, como os he dicho. Al principio, la reacción ha sido de incredulidad... "¿Qué ha sido de São Paulo?" pero la verdad es que en la entrevista había dicho lo que había dicho con conocimiento de causa, y Dakar me motivaba un montón. Si bien lo piensas, es más seguro que São Paulo, y desde luego más "exótico". Todavía me falta mucho por aprender sobre este destino, pero la verdad es que todas las referencias que tengo son buenas. Ahora de momento, os dejo que opiniéis vosotros, ¿qué os parece Dakar? ¿Qué sabes de mi país? ;)
CONTINUARÁ
NOTA: Copio y pego directamente de la página original.
I: Soy candidata [20 de Abril de 2007]
Hola, gente, hoy hago un paréntesis para contaros algo muy importante que me está pasando en estos momentos: soy candidata a una beca ICEX de Informática!! Estoy emocionadísima con el asunto, casi no pienso en nada más durante todo el día y tengo la imperiosa necesidad de publicarlo a los cuatro vientos, pero no puedo porque, al menos en el trabajo actual, lo mantengo medio en secreto. Pero os cuento ordenadamente:
El ICEX es el Instituto de Comercio Exterior de España, un organismo oficial cuyas funciones la verdad no tengo muy claras, pero me voy a tener que enterar a fondo, jeje. Lo que sí sé es que trabaja con las Oficinas Económicas de España en el Exterior, que dependen en las embajadas y se situan en los puntos del mundo en los que España tiene intereses comerciales. La beca a la que soy candidata es para desempeñar trabajos de administración de sistemas informáticos en estas oficinas. Te asignan un destino y allá te vas un año. Hay más oficinas, pero beca de informática la hay para 73(+1?) sitios. Lo de +1? lo pongo porque en realidad la convocatoria pone 74 contando Rio de Janeiro, pero por lo visto la oficina de allí va a cerrar, y no sé si quitan esa plaza, o la dan en otro destino, que también puede ser. En tal caso será un destino sorpresa.... mola!!
No recuerdo de memoria todos los destinos ofertados, pero os los copio desde la página:
ALMATY, ANKARA, ARGEL, ATENAS, BANGKOK, BELGRADO, BERLÍN, BERNA, BOGOTÁ, BRASILIA, BRUSELAS, BUCAREST, BUDAPEST, BUENOS AIRES, CARACAS, CASABLANCA, CHICAGO, COPENHAGUE, DAKAR, DAMASCO, DUBAI, DUBLÍN, DÜSSELDORF, EL CAIRO, ESTAMBUL, ESTOCOLMO, GUATEMALA, HELSINKI, HO CHI MINH, HONG KONG, JOHANNESBURGO, KIEV, KUALA LUMPUR, LA HAYA, LAGOS, LIMA, LISBOA, LONDRES, LUANDA, MANILA, MÉXICO, MIAMI, MILÁN, MOSCÚ, NUEVA DELHI, OTTAWA, PANAMÁ, PARÍS, PEKIN, PRAGA, RABAT, RIAD, RÍO DE JANEIRO, ROMA, SANTIAGO DE CHILE, SANTO DOMINGO, SAO PAULO, SEÚL, SHANGHAI, SIDNEY, SINGAPUR, SOFÍA, TAIPEI, TEHERÁN, TEL AVIV, TOKIO, TORONTO, TRÍPOLI, TÚNEZ, VARSOVIA, VIENA, VILNIUS, WASHINGTON, YAKARTA.
Por lo visto, aunque en la inscripción tienes que poner tus 5 ciudades preferidas para ir, te asignan según su criterio, así que es imposible saber a qué continente iré a parar, en caso de conseguirla.
Por cierto, en cuanto a la dotación económica está genial, dependiendo de la carestía de la vida en el destino, de 20.000 a 45.000€; y tengo entendido que en muchos de los destinos es media jornada, y en otros jornada intensiva. En resumen, que cobraría más o menos el doble que ahora trabajando menos horas, y con menos estrés. Más prometedor imposible, juas. Ah, y además, te pagan el desplazamiento al destino, que en el caso de Sydney, Shanghai, Tokio, y todo por ahí, pueden ser un par de miles también.
Pero claro, todavía soy solo candidata, tengo por delante un largo proceso de selección.
Lo primero, obviamente era cumplir los requisitos previos: tener una titulación universitaria, estar en el rango de edad, ser español(a) y no padecer ninguna enfermedad que te impida desempeñar el trabajo. Eso estaba ok, y me inscribí. La propia inscripción cuesta 20€, supongo que para disuadir a los que no lo tengan claro, y así simplificar la selección, habiendo menos. El otro día salió la lista de inscritos, somos 239 para 73 plazas, lo cual está muy bien: salimos a 3 aspirantes por destino. Considerando que alguna gente rechaza los destinos si no le dan uno de los que quería, yo creo que la cosa está relativamente fácil, pero intento, con éxito dudoso, no hacerme demasiadas ilusiones.
El proceso de selección tiene la ventaja de que no tiene en cuenta el expediente académico, porque el mío es bastante malo. Además, me parece más justo así, porque el hecho de no sacar buenas notas puede haberse debido a mil motivos, y a lo mejor sí eres tan bueno como cualquier otro para lo que se pide. La selección se basa en exámenes, como para una oposición. Primero, a finales de abril haremos un examen de informática que cuenta el 45% de la nota final; después, a finales de mayo, un examen de inglés que cuenta el 30%, más, si quieres, uno o dos exámenes más de otros idiomas a elegir (yo haré el de portugués solamente), que cuentan 2.5% cada uno. Por último, a los 200 que mejor situados hayan quedado de esos examenes, les harán entrevistas personales, y la entrevista puntuará un 35% de la nota final. A los 73 que mejor nota tengan tras la entrevista les asignan los 73 destinos en función de la nota (porque hay oficinas mas complicadas que otras), el perfil que haya detectado el entrevistador, y las preferencias. De esos 73, como alguno de los destinos no es muy apetecible (como Teherán o Casablanca ahora mismo, por ejemplo), y como alguno está muy lejos y hay gente que prefiere quedarse por Europa, siempre hay alguien que rechaza, y en función de eso van repescando de la lista, por orden, primero al que estaba en el puesto 74, luego al 75, y así. Por lo visto, el año pasado eran 70 plazas y fueron repescando hasta más allá del 150; si por estadística es, cabría esperar que este año repescasen hasta el 160 por lo menos.
Tengo entendido que en todo momento, los destinos te los ofrecen como quien ofrece lentejas: si quieres lo tomas y si no... te quedas en tu casita. Así que es un sinvivir hasta que te lo dicen, porque no sabes si te quedas al lado de casa (Lisboa o París), si te vas a pasar frio (Estocolmo, Oslo, Helsinky, Ottawa, Moscú, Vilna...) o calor (Lagos, Singapur, Sao Paulo); qué idioma se hablará, etc. A mí cualquier destino me hace una ilusión tremenda; lo único que preferiría salir de Europa, y sobre todo no querría volver a Lisboa, porque gustar me gustó, pero quiero conocer algo nuevo. Pero en cualquier caso me iría, aunque fuese a Lisboa. En la solicitud puse estos destinos como mis favoritos:
- Sao Paulo
- Sydney
- Singapur
- Luanda
- Ottawa
Los motivos son "dispersos", jeje. Por ejemplo, de Sydney y Ottawa me llama que son ciudades muy cómodas, sin casi problemas sociales; de Luanda me atrae precisamente lo contrario, me gustaría dedicar las tardes a hacer alguna cosa con alguna ONG que haya (bueno, esto está muy en el aire, obviamente). Sao Paulo, porque conozco gente allí, y porque los brasileños y brasileñas siempre me han caido muy bien, y me gustan la samba, el fútbol y el Carnaval, jeje. Y Singapur es por la ubicación y condiciones geográficas, tiene que ser paradisíaco. En todos estos destinos también juega a favor que conozco los idiomas respectivos, lo que creo que puede facilitarme las cosas.
Pues así están las cosas!! Lo malo es que me tiene la mente absorbida, y no puedo concentrarme en nada...
II: Candidata... y con posibilidades [21 de Mayo de 2007]
El pasado día 28 de abril, empezó la "carrera", el primer examen, de conocimientos informáticos. Fue un examen feo, y no salí demasiado contenta... preguntas extrañas, cosas que me parecían poco importantes preguntadas a un nivel de detalle rayano en lo estúpido, a la vez que otras a mi juicio mucho más importantes preguntadas con mucha superficialidad (La pregunta "¿qué es Linux?", con una opción "un plugin de Windows", me llegó al alma, la verdad). Pero bueno, no lo tenía claro, en muchas había contestado sin saber si contestaba la correcta, pero sabiendo que mi respuesta tenía sentido, que algo es algo. Yo, que en la uni era famosa por poder afinal mis resultados de exámenes hasta la décima antes de que salieran las notas, en este caso estaba completamente desorientada. Y encima era muy importante, más que la nota en sí, la colocación en el ránking final, en funcion de las notas de los demás.
Pues bien, salían las notas el jueves pasado, 17 de mayo, día de las Letras Galegas. Qué emoción y qué nervios pasé, mare! A las 10 o algo así me desperté como un resorte, y me fui a ver en el ordenador si habían salido. Tardé un poquito en encontrar el enlace en la página del ICEX, pero en seguida di con él. Las notas estaban ordenadas alfabéticamente, en lugar de por resultado. Las primeras que vi fueron las de las 25 personas primeras por orden alfabético de apellidos, la mayoría entre el 50 y el 60 (porcentuales). Cambié al segmento en el que debería estar yo y me busqué... SUBIDÓN!!! Tenía un 64 y pico!! Casi no me lo creía, no había visto muchas notas por encima del 60 todavía! Seguro que era una buena posición. Me dispuse a prepararme un Excel para ordenarlas por puntuación y ver por dónde andaba. Tenía calculado que quedar del 100 p'arriba era muy pero que muy buena señal, basándome en los datos del año pasado. Un clic aquí, otro allá... listo! A ver... SUBIDÓN!!!! 27!!! Uaahh!! Me costó controlarme de hacer un escándalo!!! Uf!! Les envié mensajes a mil amigos: eso significaba que mucho lo tendré que cagar en lo que resta para no llegar a pillar nada.
El examen de informática cuenta un 45% del total (lo que significa que ya tengo 29 puntos porcentuales de la nota final asegurados) el de inglés el 20%, el de portugués (voluntario) 2,5% y la entrevista el 25%. Con hacer lo que me queda "pasable", llegaré a 50, y eso el año pasado era plaza prácticamente directa, sin depender de que nadie rechazase su destino ni nada...
Así que si antes estaba nerviosa y que no lograba pensar en nada más... imaginaos ahora, que lo veo prácticamente hecho (aunque mantengo ciertas reservas, porque el inglés no se me da especialmente bien, y temo llevarme un chascazo).
El próximo paso es inglés y portugués, el sábado que viene ya (el 26 de mayo) y las notas creo que salen el 8 o el 9 de junio, no recuerdo bien. Estoy que no quepo en mí... Al principio, cuando me apunté, y sobre todo cuando me di cuenta de que me coincidía con el viaje a Londres, pensaba que estaba la cosa casi imposible, que igual no merecía mucho la pena la matada de ir hasta Madrid a examinarse, si seguro que se presentaban cientos de tíos y tías más preparados que yo, etc, etc. Pero no quise pasar sin probar suerte, no quise tener que pensar en el "y si...", y allá me fui, con decisión, con la tranquilidad de pensar que si no sale, no pierdes nada realmente, la única forma en que seguro no la sacaba era no yendo. Y efectivamente aquí estoy, en el top 30, contra mis mejores pronósticos!
La moraleja de todo esto es que, cuando quieras algo, por difícil que lo veas, no debes dejar de intentarlo, nuncas se sabe, si no pruebas, de por sí es un fracaso, si pruebas, puedes lograrlo o no, pero por lo menos te das opciones. Este razonamiento parece una obviedad, pero os aseguro que me he encontrado muchísima gente que no parece compartirlo, gente que usa la expresión "no vale la pena" con una ligereza que yo no entiendo... Sí vale la pena. Siempre y cuando quieras. Por supuesto, yo respeto las decisiones de los demás, pero a menudo la verdad es que no las entiendo.
III: De bajón, pero aún con esperanzas [30 de Mayo de 2007]
Como prometí manteneros informados de mi andadura tras la beca ICEX de Informática, y este fin de semana hice los exámenes de idiomas, pues os cuento, que soy mujer de palabra, aunque la verdad es que no me apetece especialmente hablar de ello.
Para empezar desde el principio, me remontaré a cuando esaba todavía en Coruña, a toda la semana pasada. Toda la semana he estado bastante nerviosa por los exámenes, no por miedo a que me salieran mal, sino por ansiedad... no puedo con la espera de saber si lo consigo o no, o en tal caso a dónde me voy. Además, en el trabajo he tenido muchísimo lío, porque teníamos que presentar la documentación para pedir una subvención y nos faltaban mil cosas. Estuvimos toda la semana mano a mano el jefe, otro compañero y yo. La verdad es que no estuvo mal, a mí me gusta mi trabajo, y con ellos me llevo muy bien, me siento muy a gusto. Pero trabajamos muchísimo, parando solo para comer, juntos, de prisa y sin quitarnos aquello de la cabeza (eso sí, comida de p.m. a cuenta del jefe, jeje); y volviendo a casa bastante más tarde de lo normal, el último día, jueves, a la una de la mañana. Total, que eso no me habría importado de normal, pero es que no pude chapar nada de nada.
Por otra parte, durante esa semana, se la pasaron mis amigos intentando quedar conmigo, sin decirme para qué, engañándome con excusas, pero lo que querían era darme el regalo de cumpleaños, que había sido la semana anterior. Como me habían estado llamando los otros días, el viernes, aunque quería acostarme temprano porque tenía que coger el avión a las 6 de la mañana, quedé de pasarme un ratillo a las diez. Como esa tarde libraba, esperaba dormir la siesta, pero no pude, entre los nervios y que mis compañeros de piso decidieron que era un día estupendo para aprender a tocar y enseñar a tocar la guitarra. Por la noche acabé yendo a tomar una tapa y hasta casi la una otra vez. Me acosté echa polvo y preocupada por quedarme dormida, y por eso no descansé nada bien.
Me quedé dormida. De milagro no perdí el avión. Lo tenía a las 6:10, y me desperté a las 5:15 (el despertador lo había perdido entre las mantas, se ve que lo había cogido y apagado), menos mal que había hecho el check in online, y ya tenía tarjeta de embarque, porque si tengo que facturar no me da tiempo ni de coña. Ni me duché ni nada, ni siquiera había preparado el equipaje, que con las prisas se redujo a una muda limpia y una camiseta para dormir (me quedaría en Madrid hasta el domingo por la tarde). Tampoco desayuné. Salí de casa corriendo. No me acordaba donde tenía el coche, pero lo encontré, afortunadamente, bastante rápido. Conduje hasta el aeropuerto y lo dejé mal aparcado, justo en frente de una señal enorme de prohibición; decidí que prefería pagar la multa a perder el avión y mi oportunidad. Corriendo llegué a la puerta de embarque, para comprobar que el avión se retrasaba unos minutos. Me cabreé muchísimo, ¿cómo puede retrasarse, aunque sólo sea un minuto, la salida del primer avión de la mañana? Yo estaba preocupadísima, incluso sin retraso, llegaría a Madrid con el tiempo muy justo, y a la T4, que es peor.
Entre pitos y flautas, el avión aterrizó a las 8:05, 25 minutos de retraso. Y yo necesitaba estar en el sitio del examen a las 8:30. Corrí hasta la estación de metro de la T4, con la incertidumbre de que no sabía dónde estaba exactamente y tenía miedo de no encontrarla. Pero llegué en seguida, recuerdo haber mirado el reloj a las 8:11 justo cuando llegué. Según la página del metro de Madrid, allí y a aquella hora pasaba uno cada 3 minutos, así que no tendría por qué preocuparme, porque hasta mi salida, en Parque de las Naciones, sólo había tres paradas. Pero el metro tardó casi 10 minutos, casi me da un mal con los nervios.
Llegué a Parque de las naciones a las 8:27, pero desorientada. Sabía que se podía llegar al centro de los exámenes en un par de minutos caminando, pero no sabía hacia donde tirar; había creído que me acordaría por la otra vez que había estado, pero no. Así que empecé a preguntar desesperadamente. Pero a nadie parecía sonarle aquella calle ni el nombre del edificio. Le pregunté a varias personas, 7 u 8, y nada. Al final, me cogí un taxi en el Palacio de Congresos; la taxista tampoco sabía la dirección, menos mal que tenía GPS! Llegué a mi destino a las 8:38, pero a tiempo, la gente estaba entrando. Buf, ¡¡qué alivio!!
Soy consciente de que tenía unas pintas lamentables, con la primera ropa que había encontrado, despeinada, sudada, con ojeras... un cromo, vaya, pero estaba allí, estaba contenta.
Había quedado en un punto en concreto con gente de un foro de aspirantes y becarios de estas becas hacía un rato, pero como llegué tan tarde ya no esperaba verlos. Sin embargo, mientras me buscaba en las listas, alguno me reconoció y saludó. La verdad es que lo agradecí, pero entre que tomé nota de las aulas y horas de mis cuatro exámenes (inglés escrito a las 9:00; inglés oral a las 10:00; portugués escrito a las 12:30; y portugués oral a las 13:30) y busqué el aula del primero no tuve tiempo de hablar con nadie, en realidad.
El primer examen, inglés escrito. Por el tipo de examen que era, yo estaba confiada, ilusa de mí. Consistía en un único texto, de un folio de longitud, al que habían quitado 50 palabras que tú tenías que rellenar. Para cada hueco te daban 4 opciones, y una respuesta errónea restaba 0.33 puntos, de tal forma que, en término medio, estadísticamente, el que contestase a todas al azar, sacaría un 0. Las opciones eran chunguísimas, todo sinónimos, no quiero aburrir con esto, pero vamos, que yo creo que se lo ponen a un nativo y también duda. Es más, creo que se lo ponen al autor del texto original, y ya no vuelve a poner lo mismo en todas. Desde luego, no era nivel de 3º de EOI, como se suponía. Porque yo bilingüe no soy, ni mucho menos, pero leñe, en selectividad saqué un 9, y se supone que es ese nivel más o menos. Pues en este, me he encontrado con que no sabía fijo ninguna, así que lo de dejar solo en las que dudaba no me valía, decidí contestar a todo, que en cuestiones de azar cuanto mayor es el número de experimentos, más se acerca el resultado a la esperanza matemática (es decir, que dado que mi mejor espectativa era el 0, no tenía nada que perder y me tiré a la piscina). Salí del examen muy descontenta, no sólo por lo mal que me había salido, sino por lo traicionero que me pareció.
Pero no tuve tiempo de regodearme en mis penas, ya eran las 9:55 y tenía que presentarme en la sala del oral. Se suponía que era la tercera que tenía que entrar, pero cuando llegó la examinadora, era la única presente, y me mandó de primera. Que yo sepa, aún no se había examinado nadie, ni en esa aula, ni en ninguna otra. Entre el disgusto del escrito, el estrés que había pasado para llegar, la falta de sueño que arrastraba de toda la semana... tranquila no estaba, precisamente. Me senté delante de la profe y me temblaba todo. Me dio una hoja con un texto de unas 15 líneas y unas preguntas al pie, que me pidió que leyese en voz alta. Pedí permiso para leerlo para mí primero, y no me dejó. Así que empecé a leer, me trastabillé un poco y perdí el sentido de la primera frase, y se notaba que estaba diciendo las palabras inconexamente. Mal comienzo. Pero bueno, para el final del texto me había soltado un poco y las leí más o menos aceptablemente. Después, la examinadora me fue formulando una a una las preguntas que venían en la hoja, sobre mi opinión acerca del texto. Encima, el tema del texto no me molaba nada: oportunidades de trabajo para los jóvenes, que si en Irlanda se confia en ellos y en su capacidad, iniciativa, energía, etc; mientras que en Francia se teme mucho por su inexperiencia, y no se les dan buenas oportunidades. Preguntas: ¿Estas de acuerdo? ¿Cual crees que es la situación en España? ¿Por qué? Etc... Menos mal que la frase "no sé, nunca me había parado a pensar en ello y no tengo una idea formada" me la traía pensada de casa, porque creo que fue lo único que dije con sentido. Bueno, algo más sí, pero muy atropelladamente, muy insegura, muy mal...Es que no se me ocurría nada. Jo, a otra gente le preguntaron temas sobre los que sí tenía opinión... En fin, a lo mejor me habría cortado por igual con todos, no sé.
Lo bueno que tuvo entrar a inglés de primera, fue que quedé libre mucho rato, hasta portugués, y mientras tanto la otra gente esperaba a entrar a inglés. En este intervalo de tiempo fue cuando hice más vida social, que sinceramente fue lo mejor del dia. Me encantó conocer por fin a alguna gente del foro, todos me cayeron muy bien, así que espero que me dén la beca para hacer el curso con ellos, porque pinta que nos lo pasaremos muy bien.
Me despedí de mis nuevos amigos para ir al escrito de portugués, que de los del foro era la única que lo tenía. El tipo de examen era el mismo que el de inglés, pero menos p**o; en lugar de tanto sinónimo, que también los había, teníamos además formas verbales, ortografía, demostrativos... un poco más variado, en resumen. Acabé relativamente pronto y entregué. Al entregar, me informó la vigilanta de la sala que tenía mal marcado el idioma, que sólo había que marcar el portugués, para que la máquina de corregir discriminase los idiomas (es que era una hoja de respuestas de ésas para lector óptico); yo había pensado que era por temas estadísticos, o para a ver cuáles eran los idiomas en los que te manejabas, de cara al destino y había marcado "castellano, gallego, inglés y portugués", ahí es ná. No pasó nada, estaba a lápiz y lo corregí sin mayor incidencia... pero es que en el de inglés había hecho lo mismo!!! Se lo dije a ella y me dijo que no pasaba nada, pero no me quedé tranquila. De todas formas, no era el momento de rallarme con eso, que aún tenía el oral de portugués.
Me dirigí a la sala del oral de portugués, en la que estaba convocada a las 13:30. Llevaba, por cierto, sin comer, desde el día anterior a las 3 de la tarde, un bocadillo cutre. Imaginaos qué pájara. En este, era la sexta en entrar; a 10-15 minutos por persona, esperé más de una hora allí de pie; casi me da algo. Lo bueno, es que estuve hablando con la gente que estaba esperando, de portugués, alemán e italiano, y también me cayeron guay. Les hablé del foro, y al dia siguiente aparecieron en éste como 20 usuarios nuevos, jajajaja. Cuando por fin entré a portugués, estaba en las últimas, de cansancio, hambre y nervios. El sistema, como el de inglés; el tema, más de mi gusto (funcionarios); el idioma, mejor en general. La verdad es que este sí que me salió bastante bien, incluso me reí con la profesora, jeje. Y es que como mi mejor amigo se está preparando unas opos, sobre este tema sí tenía una opinión que dar, una opinión bien formada. Lo único que en un momento dado me puso una cara rara, porque dije algo de los funcionarios de la enseñanza... sin darme cuenta de que ella era uno!!! A ver si no es vengativa, jeje... Me cortó bastante pronto y me dijo que "lo que necesitaba ver ya lo había visto". Frase que en sí misma no tiene por qué ser buena, pero por su expresión me dio muy buen rollo. Así que, después de todo, salí de allí bastante contenta.
Y bueno, los exámenes acabaron ahí. Iba a ir a comer a casa de amigo, pero al final hablé con él y decidí ir con un par de compañeros de fatigas, ya que él ya había comido y no quería hacerle trabajar en vano. Además aquellos chicos me habían caído bien.
Hasta el lunes, ya poco más tengo que decir al respecto. Pasé el resto del sábado y el domingo entero en Madrid, aprovechando la coyuntura para estar con estos amigos a los que casi no veo. Lo pasé bien, pero eso ya sería, en todo caso, tema de otra opinión.
El lunes volví al trabajo, pero a decir verdad no me cundió mucho. Por una parte estaba demasiado cansada, y por la otra demasiado nerviosa. Hasta me salió un orzuelo, mal típico del estrés, que todavía me está dando la lata. Por la tarde, vi en el foro que alguien había encontrado el texto original del examen escrito de inglés y había publicado el enlace. Lo miré, craso error; me deprimí. No recordaba todas las preguntas y respuestas, pero de las que recordaba, tenía bien menos de la tercera parte, y el resto mal. Echando el cálculo, mi nota oscilará entre el 0 y el 1... y no exagero, lo pienso de verdad. Si resulta que haya acertado la mayoría de las que no recordaba, que puede ser que por eso no me hayan llamado tanto la atención, puede que llegue al 2, pero no más, eso seguro. Insistir en lo de que eran opciones muy raras. Cosas como (traduzco, pero mantengo el sentido):
Por sus _______ calles puedes encontrar ...
a) atestadas
b) ruidosas
c) tortuosas
d) empedradas
Que bueno, en el resto de la frase habla de mucha gente y puede que la que más sentido tenga sea atestadas, pero que eso no implica que cualquiera de las otras 3 puedan ser correctas... al menos yo, no sé si las calles de Bombay son empedradas o no, pero eso es porque no estuve allí, no porque no sepa inglés.
La parte menos mala es que fue lotería poderosa para todos... así que como lo que cuenta es el ránkin, si las listas no se mueven exageradamente, puedo mantenerme en un puesto aceptable (por andar alrededor del 100 firmaba ya mismo), que aunque no me dé plaza directa es más que probable que remonte en la entrevista o, en último caso, que pille cacho en las repescas (lo cual me viene estupendamente, porque la mayoría de la gente rechazaría destinos que se encuentran entre mis favoritos, como los de África Subsahariana, Sudamérica, o Europa del Este).
Además, aunque el portu puntúa poco, cuento con que un par de puestos me los puede dar. Del examen de portugués, por cierto, comentar que también he visto el texto original y, aunque no voy a reclamar, porque no puntua lo suficiente para que merezca la pena, estoy viendo que al menos dos me las van a dar por falladas erroneamente. Y explicaría el motivo, pero es que sería un rollo que no merece la pena. Lo que sí os digo es que yo estoy segura de que mis opciones son más correctas que como lo ponía el periodista que escribió el artículo. Sé que suena demasiado "sobrao", pero es cierto, absolutamente cierto. Y eso me cabrea.
Total, que a la espera de lo que suceda estoy hasta el próximo día 8... os mantendré informados.
IV: Sigo en la brecha [9 de Junio de 2007]
El viernes pasado salieron los resultados de estas pruebas de idiomas, y esta opinión es para contároslos. Eso, y más detalles. Lo malo es que no me siento inspirada, pero bueno.
La espera por las notas fue dura. Estando ansiosa, 8 horas en la ofi al día pueden ser una tortura. Menos mal que el jefe es comprensivo y además desde que le he dicho lo de la beca me hace la pelota cosa mala, jeje. En varias ocasiones me ha hecho ver que se daba cuenta de que no daba estaba cundiendo, pero de buen rollo, haciendo la broma de en qué parte del mundo tenía la cabeza, o algo así.
Total, que salieron el viernes. Inglés mal, un 34%, la nota 150 y pico de los 195 presentados... una pequeña vergüenza. Si llega a depender sólo de inglés habría bajado 39 puestos en la clasificación general, hasta el 66, que tampoco sería tan malo porque es dentro de los 74, pero bueno, mejor cuanto más arriba. Portugués, sin embargo, muy bien, creo que saqué la cuarta o quinta mejor nota de todos los exámenes de idiomas que no eran inglés, un 74%, y eso me salvó 19 plazas!! Así que en lugar de en el 66 quedo en el 47, dentro del top 50. Por mí genial. Prefiero estar así por el medio que entre los 10 primeros, porque a éstos lo normal es que los envíen a las oficinas más grandes, donde más se trabaja. Es cierto que también es donde más se aprende, pero mi motivo de pedir la beca pertenece más al plano personal que al profesional, y quiero tener tiempo libre no sólo para hacer turismo, sino para dedicarme a mi formación por libre, algo que echo mucho de menos desde que trabajo.
Así que sigo adelante con el proceso de selección. Próxima estación: entrevista personal, el 27 de junio. A ver lo que me espera. Después de eso, a mediados de julio, sí que ya te dicen si entras y, en tal caso, el destino. No os imagináis ninguno cuánto me tarda ya. Esta incertidumbre es horrible.
Por otra parte, otra cosa que quería comentar, es que a raíz de todo esto me ha estado mi jefe hablando de los proyectos de futuro de la empresa, y de lo que tenía pensado para mí y demás, para meterme ilusión e intentar que me quede, porque la verdad es que seguro que a nivel profesional me vendría mejor. En realidad me tienta, mi trabajo me gusta y me tratan bien, no tengo motivo para querer irme, pero el caso es que siento que estoy quemando los últimos cartuchos de mi juventud (suena mal, pero es cierto, seré joven todavía unos años, pero no tanto como para andar por el mundo haciendo el ganso y sin pensar más que en el yo y el ahora); tengo inquietudes de viajar y ver mundo, que nunca lo he podido hacer por falta de dinero, y seguramente si no lo hago ahora ya no llegue a hacerlo. Si me quedo ahora ya todo pinta que será para estabilizarme en este trabajo, que me encanta, es cierto, pero creo que es pronto. El contrapunto es el pensar en qué me esperará, si me voy, a la vuelta. Encontraré otro trabajo, eso seguro, y con toda probabilidad mejor pagado. Pero el factor humano, que yo valoro tanto como el sueldo, está más difícil, y en ese aspecto sí creo que lo puedo tener más difícil a la vuelta...
Así que ya véis que no lo tengo nada claro. De momento he decidido, y así se lo he dicho ya al jefe, que iré a la entrevista como tenía pensado y que decidiré si lo tomo o lo dejo en función del destino que me ofrezcan. Lo malo es que me ofrecerán un destino u otro, seguramente, en función de lo que diga en la entrevista, y ya no sé cómo orientarla. Estoy en un mar de dudas e incertidumbres. Voy a estar, Dios mediante, ante una de las decisiones más importantes, por no decir la más importante, que haya tenido en toda mi vida.
V: Desenlace de la beca ICEX: Me voy a Dakar!!!! [12 de Julio de 2007]
Bueno, bueno, bueno, Dakar, capital de Senegal, dos millones y medio de habitantes, situada en el Cabo Verde, punto más occidental de África, un calor que te torras todo el año, una situación socioeconómica razonable... un destino FETÉN, por lo menos para mi gusto, y eso que no lo había puesto entre las favoritas.
Pero bueno, estoy empezando por el final. Os contaré primero qué tal la entrevista. Fue el 27, jueves. Llegué a Madrid el día antes a las 8 de la tarde aprox, y me fui a dormir a casa de mi amiga Sandra en Torrelodones. Cené en su casa con ella y unos amigos suyos, una velada agradable, y tempranito para camita (amablemente me cedió la suya) que al día siguiente había que cundir. Al día siguiente, me tuve que levantar muy temprano, aunque la entrevista era las 10:30, es lo malo que tienen las afueras. Me vestí lo mejor que pude (la elegancia no es lo mío, la verdad), con un pantalón cremita y una camisa de rayas, y me fui a coger el autobús. En realidad llegué al sitio de la entrevista casi una hora temprano, pero mejor, no quería nervios. Me fui a desayunar a un Rodilla cercano y, como me agobia estar sola en un establecimiento me salí enseguida. Los zapatos (unos "24 horas" que me costaron una pasta) me estaban haciendo un daño terrible, bueno, en realidad eran los calcetines, que eran nuevos y eran como ásperos (los tiré esa misma tarde a la basura), y busqué una farmacia para comprar apósitos Compeed. De camino me encontré a otro de los aspirantes que tenían la entrevista, uno muy majo que ya había conocido el día de los idiomas, que por cierto estaba de numero 2 del ránking, le dije que iba ahora y segui hacia la farmacia. Compré los apósitos, me puse uno en cada pie sentada en un banco de la calle y volví al sitio de la entrevista.
Cuando entré me encontré con que ya estaban allí tres chicos conocidos, de los habituales del foro y a los que ya había conocido también el dia de los examenes de idiomas. Gente supermaja. Tuve que esperar un ratillo, los otros conocidos fueron pasando antes y según iban saliendo me iban contando sus impresiones. La verdad es que todos salían contentos, la entrevista parecía ser muy distendida.
Por fin me tocó a mí el turno. He de decir que esa mañana me había levantado con el cable cruzado y tenía medio decidido que me quedaría en mi empresa actual, donde me habían ofrecido una mejora de condiciones bastante apetecible, donde estoy muy contenta del trato y del trabajo, y donde se me estaban abriendo caminos de mejora profesional apetitosos. Así que yo iba en plan "sobrao", ya que no tenía nada que perder, porque no me preocupaba si no les gustaba y no me daban nada. Hice la entrevista más informal de todos los tiempos (solo tengo pena de no haberme presentado en camiseta y vaqueros), sin preocuparme en lo más mínimo de aparentar nada, simplemente les iba a comentar mi situación y "a ver". Paradójicamente, esa actitud estoy segura de que me valió un montón para hacer la entrevista que hice, de la cual sali bailando de satisfacción.
Tuve la sensación de llevar yo las riendas en todo momento, y eso cuando te están entrevistando 3 personas para un señor organismo como es el Instituto Español de Comercio Exterior es un puntazo. En el momento ni me daba cuenta, pero lo pienso ahora y pienso "tía, no es normal ir de tan sobrada, deberías haberte cortao un poco", y a continuación "qué va!! La sensación esa es subidón subidón!!", me da la risa, me crezco... jajaja. Me preguntaron un par de cosas en las que metí la pata, y yo más ancha que larga en plan "ah, no, pues no sabía", jeje. Relax Total.
Y el cúlmen fue ya cuando hablamos de los destinos. Después de haber comentado en el devenir de la entrevista la mejora que me hacían en la empresa, y que la verdad ya no estaba tan convencida de irme como en el momento de echar la solicitud (sinceridad before all), les noté muy interesados en ofrecerme un destino que "realmente" no fuera a rechazar. Yo sabía que a la mayoría de los demás les preguntaban por un par de destinos, conmigo se recorrieron el mapamundi enterito, para asegurarse, y eso que tenían la lista de mis 5 favoritos. Después de mucho preguntar, llegué a decir algo así como "hombre, al que me iria fijísimo es a São Paulo". Era mi predilecto, siempre he querido conocer Brasil, y en São Paulo tengo familia, y bueno, no sé el motivo, pero me llamaba mogollón. Pero los motivos a ellos no se los expliqué mucho, no me dieron mucha opción. El caso es que me preguntaron como para asegurarse de que me habían oído bien, y le vi al que aparentemente mandaba más como apuntaba São Paulo y lo rodeaba con un círculo. Razón por la que salí pensando que a São Paulo me iba casi fijo. Pero debió de ser una bromita del tipo, porque ya veis que no, jajaja.
La clave de la entrevista, creo yo visto ahora que ya pasó estuvo en el momento en el que dije algo así como "por cierto, sobre mis 5 destinos predilectos de la solicitud, quería decir que he cambiado de opinión sobre Luanda, y que no me iría allí". A lo cual noté que los 3 pares de ojos que a mi frente estaban se clavaban en mí a la espera de explicación, como diciendo en silencio "Comoooorrrr, pero si a Luanda era a donde te ibamos a mandar sin lugar a dudas???". Uno de ellos exclamó "pero si en Angola se habla portugués", y yo "ya, ya lo sé , pero es que me he estado informando y me ha entrado un poco de miedo, creo que lo pasaría mal, y para eso, considerando lo bien que me lo ponen en el trabajo actual, pues no me arriesgaría". Y él "pues es una oportunidad inmejorable de conocer África". Y yo "sí, si por eso estaba entre mis 5, que conocer África me gustaría un montón, pero...". Total, que se dieron por vencidos respecto a Luanda, y atacaron por el flanco: "Y entonces, a Lagos??", a lo cual yo ya no sabía ni dónde meterme. Sabía que el becario de Lagos estaba contento, pero la situación social y política de Nigeria me parece que es muy del estilo de la de Angola, y me daba miedo también. Así se lo dije, aunque no tan tajante como con respecto a Luanda. Y después añadí: "mira, de África solamente me iría a Dakar o a Johannesburgo". Y el tipo, "Y a Argel?" Respuesta: "No, no me iría a un país islámico". Anotar aquí que, aunque en la entrevista no lo dije y lo sabía, Senegal es un país islámico, pero lo veo de otra forma, creo que no es tan integrista como los del Magreb. El motivo no es más que el hecho de que soy mujer, y como no sé las costumbres, lo que se llevarían a mal y lo que no (como irme a bañar a la playa en bañador, por ejemplo), pues mejor curarse en salud, y directamente no ir. Una cosa es ir para unos días de turismo, y otra muy diferente para vivir un año entero.
Total, que después de la entrevista fui a comer con los compañeros, y ahí estuvimos intercambiando impresiones hasta las 6 o algo así, que ya nos separamos porque se iba cada mochuelo a su olivo, cada uno a su ciudad de procedencia. Yo en cambio, me quedaría hasta el domingo, aprovechando que era la semana del EuroPride en Madrid, había una fiesta tremenda, e incluso iban unas amigas mías que me traerían en coche de vuelta. Todo a pedir de boca. Y por cierto me lo pasé muy pero que muy bien. Pero ese fue el motivo principal de que ya no escribiese sobre la entrevista. Llegué el domingo tarde y el lunes me pilló una vorágine de trabajo tremenda. Entre eso y que dedicaba cada minuto libre a ver si había alguna noticia de lo de la beca, figuraos, jeje.
Y por fin, hoy, han salido las listas definitivas. Y me han dado Dakar, como os he dicho. Al principio, la reacción ha sido de incredulidad... "¿Qué ha sido de São Paulo?" pero la verdad es que en la entrevista había dicho lo que había dicho con conocimiento de causa, y Dakar me motivaba un montón. Si bien lo piensas, es más seguro que São Paulo, y desde luego más "exótico". Todavía me falta mucho por aprender sobre este destino, pero la verdad es que todas las referencias que tengo son buenas. Ahora de momento, os dejo que opiniéis vosotros, ¿qué os parece Dakar? ¿Qué sabes de mi país? ;)
CONTINUARÁ
jueves, 6 de septiembre de 2007
En el curso
Bueno, una vez más, empiezo pidiendo disculpas por lo poco que escribo. Este blog nació con la sana intención de mantener a mis amigos enterados de mis andanzas facilmente, sin tener que contar las mismas historietas mil veces, y sin que se me olvide nadie... pero la verdad es que no está cumpliendo su cometido por un motivo: mi vagancia. Y lo siento. Bueno, lo cierto es que también tengo siempre mil cosas que hacer, pero no es menos cierto que al final tampoco las hago, y no sé en qué se me va el tiempo, mientras se me acumula la tarea. Todavía no he mirado nada de francés, para el examen del curso no estudié nada, la novela de mi padre está intacta en la maleta, no he escrito emails y ni siquiera he salido mucho de farra... menos mal que el curso acaba relativamente temprano...
En fin, os cuento cosillas del curso, no?
El primer día llegué un poco tarde, cómo no, me lié en el metro, pero no pasó nada. Al llegar le mostré mi DNI a una chica de seguridad y entré. Ya estaba todo el mundo sentado y ocupé el primer sitio libre que encontré, en segunda fila. Estaba haciéndose una ronda de presentaciones, cada uno decía de sí mismo lo que le daba la gana, qué destino tenía y eso... bueno, simpático al principio (el Club de la Comedia ha cambiado la sociedad, os lo digo yo), pero llegando a los últimos ya de lo único que daban ganas era de que se formase un coro "Hooola, Paaacooo, nosotros también somos precarios"... pero no ocurrió. Mi compañero resultó ser el futuro becario de São Paulo, curioso, justo el destino que creía que me iban a dar a mí.
Bueno, algo gracioso, es que, debido (supongo) a la poca proporción de chicas (como 5 de 80, aproximadamente) y a mi verborrea incontenida en el foro de aspirantes, resulta que era famosa antes de llegar, y yo sin saberlo. Los primeros días, cuando todavía casi nadie conocía a nadie y todo el mundo estaba deseoso de romper el hielo, me sentí como una celebridad, la gente se me presentaba por doquier: "oye, tú eres Pepa??", "Sí, sí", "¿qué tal? Yo soy <>" Y a partir de ahí ya teníamos para hablar un ratillo, de destinos, del curro que habíamos dejado... esa parte, en la que empiezas a conocer a la gente, me encanta.
Que me reconociesen los compañeros, dentro de lo que cabe, no me sorprendía, pero lo que flipé fue cuando, al segundo día, al ir a enseñarle el DNI a la chica de seguridad, me dice sin darme tiempo "Josefa Jul, ¿verdad?". Sin palabras... flipping out, que dicen en las pelis VOS.
Y así empezó el curso. En la primera clase instalamos Windows. En la segunda, otra vez, de otra manera. Y en la tercera... y así como tres días, hasta que quedó "niquelao, planchao, y corporativo". Y entonces nos avisaron que guardáramos todos los datos personales que esa tarde lo iban a pisar todo e instalarlo ellos para que quedase "niquelao, planchao y corporativo". Si eso es lo que van a confiar en nuestro buen hacer en destino... ejem.
La verdad es que el curso es bastante coñazo, y cada vez parece que más, pero sí que lo veo útil la verdad. Aparte de que me está molando pasar un mesecito en la capi. Y el rollo de estar los 80 compañeros en la misma situación está guay, une mucho. De los que he ido conociendo, todos me caen bien. La única preocupación es no quedarme dormida en la clase de después de comer.
En cuanto a "lo que es Madrid", más allá del centro del curso, tampoco es que haya hecho gran cosa. Salí los dos viernes que han pasado hasta las 6 de la mañana. Se está demostrando que los que más vida tenemos para la "carallada" somos los gallegos (y no lo digo por mí), no podía ser de otra forma. Y también somos los que más representación tenemos entre los becarios (10% aprox). Eso solo puede ser bueno, jeje. De turismo no se puede decir que haya hecho nada, pero a mí lo que me gusta es el hecho de "estar aquí".
De momento la gran fuente de anécdotas, aparte del curso, es el Metro. Ayer flipamos con dos tíos que parecían sacados de la peli de Lars Von Trier, Los Idiotas, cuya conversación yo no pillé, pero que el chico que iba conmigo dedujo que eran chaperos que trabajaban en el metro y que les habían pillado sin haber pagado el ticket. Desde que él se fue, aún la armaron un poco, amenazando a una operaria del metro y tal... Otro día, ya hará sus buenos 10 días, yo sólo lo escuché desde la entrada porque estaba hablando por teléfono, pero por lo visto una mujer, no se sabe por qué motivo, gritaba como el cerdo cuando lo matan, y se quitó la ropa; hicieron falta 4 parejas de polis para sacarla de allí, tremendo. Otro día, robaron a un compañero, pero la gracia fue que otro se coscó de quién había sido, le rodearon entre todos los becarios que iban (me imagino yo unos quince jóvenes varones), y el ratero devolvió la cartera al momento, como el que no quiere lio, esa tiene que haber sido digna de ser vista, lástima que yo no estaba. Y ya la última fue hoy, que desalojaron el tren en que iba yo, no sé el motivo; por lo visto pasa mucho, pero para mí, inocente hobbit fuera de la comarca, es todo nuevo...
Por lo demás, ya casi he terminado de ponerme vacunas de cosas chungas, ya sólo me falta una dosis de antitetánica y tomarme la anticolérica, que aún no he podido porque he estado con síntomas gripales unos días (presumiblemente efectos secundarios del cóctel que llevo). Y todavía no sé qué día me piro a Dakar, pero estoy temiéndome que sea el 1 y que no me dé más tiempo que de pasar por casa de los papis (y aún gracias que me da tiempo de eso).
Bueno, por hoy nada más, me voy a dormir, que me levanto a las 7 de la mañana... a ver si un día de estos os cuelgo alguna fotillo de juergas o similares.
En fin, os cuento cosillas del curso, no?
El primer día llegué un poco tarde, cómo no, me lié en el metro, pero no pasó nada. Al llegar le mostré mi DNI a una chica de seguridad y entré. Ya estaba todo el mundo sentado y ocupé el primer sitio libre que encontré, en segunda fila. Estaba haciéndose una ronda de presentaciones, cada uno decía de sí mismo lo que le daba la gana, qué destino tenía y eso... bueno, simpático al principio (el Club de la Comedia ha cambiado la sociedad, os lo digo yo), pero llegando a los últimos ya de lo único que daban ganas era de que se formase un coro "Hooola, Paaacooo, nosotros también somos precarios"... pero no ocurrió. Mi compañero resultó ser el futuro becario de São Paulo, curioso, justo el destino que creía que me iban a dar a mí.
Bueno, algo gracioso, es que, debido (supongo) a la poca proporción de chicas (como 5 de 80, aproximadamente) y a mi verborrea incontenida en el foro de aspirantes, resulta que era famosa antes de llegar, y yo sin saberlo. Los primeros días, cuando todavía casi nadie conocía a nadie y todo el mundo estaba deseoso de romper el hielo, me sentí como una celebridad, la gente se me presentaba por doquier: "oye, tú eres Pepa??", "Sí, sí", "¿qué tal? Yo soy <
Que me reconociesen los compañeros, dentro de lo que cabe, no me sorprendía, pero lo que flipé fue cuando, al segundo día, al ir a enseñarle el DNI a la chica de seguridad, me dice sin darme tiempo "Josefa Jul, ¿verdad?". Sin palabras... flipping out, que dicen en las pelis VOS.
Y así empezó el curso. En la primera clase instalamos Windows. En la segunda, otra vez, de otra manera. Y en la tercera... y así como tres días, hasta que quedó "niquelao, planchao, y corporativo". Y entonces nos avisaron que guardáramos todos los datos personales que esa tarde lo iban a pisar todo e instalarlo ellos para que quedase "niquelao, planchao y corporativo". Si eso es lo que van a confiar en nuestro buen hacer en destino... ejem.
La verdad es que el curso es bastante coñazo, y cada vez parece que más, pero sí que lo veo útil la verdad. Aparte de que me está molando pasar un mesecito en la capi. Y el rollo de estar los 80 compañeros en la misma situación está guay, une mucho. De los que he ido conociendo, todos me caen bien. La única preocupación es no quedarme dormida en la clase de después de comer.
En cuanto a "lo que es Madrid", más allá del centro del curso, tampoco es que haya hecho gran cosa. Salí los dos viernes que han pasado hasta las 6 de la mañana. Se está demostrando que los que más vida tenemos para la "carallada" somos los gallegos (y no lo digo por mí), no podía ser de otra forma. Y también somos los que más representación tenemos entre los becarios (10% aprox). Eso solo puede ser bueno, jeje. De turismo no se puede decir que haya hecho nada, pero a mí lo que me gusta es el hecho de "estar aquí".
De momento la gran fuente de anécdotas, aparte del curso, es el Metro. Ayer flipamos con dos tíos que parecían sacados de la peli de Lars Von Trier, Los Idiotas, cuya conversación yo no pillé, pero que el chico que iba conmigo dedujo que eran chaperos que trabajaban en el metro y que les habían pillado sin haber pagado el ticket. Desde que él se fue, aún la armaron un poco, amenazando a una operaria del metro y tal... Otro día, ya hará sus buenos 10 días, yo sólo lo escuché desde la entrada porque estaba hablando por teléfono, pero por lo visto una mujer, no se sabe por qué motivo, gritaba como el cerdo cuando lo matan, y se quitó la ropa; hicieron falta 4 parejas de polis para sacarla de allí, tremendo. Otro día, robaron a un compañero, pero la gracia fue que otro se coscó de quién había sido, le rodearon entre todos los becarios que iban (me imagino yo unos quince jóvenes varones), y el ratero devolvió la cartera al momento, como el que no quiere lio, esa tiene que haber sido digna de ser vista, lástima que yo no estaba. Y ya la última fue hoy, que desalojaron el tren en que iba yo, no sé el motivo; por lo visto pasa mucho, pero para mí, inocente hobbit fuera de la comarca, es todo nuevo...
Por lo demás, ya casi he terminado de ponerme vacunas de cosas chungas, ya sólo me falta una dosis de antitetánica y tomarme la anticolérica, que aún no he podido porque he estado con síntomas gripales unos días (presumiblemente efectos secundarios del cóctel que llevo). Y todavía no sé qué día me piro a Dakar, pero estoy temiéndome que sea el 1 y que no me dé más tiempo que de pasar por casa de los papis (y aún gracias que me da tiempo de eso).
Bueno, por hoy nada más, me voy a dormir, que me levanto a las 7 de la mañana... a ver si un día de estos os cuelgo alguna fotillo de juergas o similares.
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